El mundo de la logística necesita cada vez con más ahínco de la figura de los centros de distribución. Abreviados como CD, son indispensables dentro de la cadena de suministro de infinidad de sectores industriales y comerciales.
Definición y propósito
Los centros de distribución son un inmueble, una instalación con fines logísticos, que resulta clave para entender la cadena de suministro de todas las empresas actuales.
Desde una perspectiva simple, podría definirse como un lugar donde se reciben, se almacenan, preparan y despachan todos los productos de forma organizada y sobre todo eficiente.
Su propósito no es otro que acelerar el flujo de mercancías. Esto permite que los clientes sean atendidos de forma oportuna y rentable desde la eficiencia y reducción de costes operativos.
Tipos de centros de distribución
Hay muchos tipos. De hecho, no existe una forma de unirlos todos dentro de grupos concretos, ya que cada uno puede ser diferente dependiendo de los productos que manejan, de su complejidad, de su rol dentro de una cadena de suministro, entre otras tantas variables. No obstante, es común hablar de los siguientes tipos:
- Centros de distribución nacional: abastecen a un mercado nacional, generalmente con una amplia variedad de productos y alta rotación de inventario.
- Centros de distribución regional: sirven a una región específica del país, enfocándose en productos con mayor demanda local.
- Centros de distribución de cross-docking: su función principal es la transferencia rápida de mercancías entre proveedores y clientes, minimizando el tiempo de almacenamiento.
- Centros de distribución de valor agregado: ofrecen servicios adicionales al almacenamiento básico, como empaquetado personalizado, etiquetado, ensamblaje ligero o preparación de pedidos.
Diseño y estructura
Los centros de distribución son inmuebles preparados para servir a un propósito logístico, siendo una industria marcada de forma considerable por cuestiones como la eficiencia, la reducción de costes, el papel de la alta tecnología y la precisión. Por eso, su diseño y estructura responde a elementos como:
- Áreas de recepción y despacho: que deben estar diseñadas para un flujo eficiente de mercancías, con muelles de carga y descarga adecuados, y espacio para inspección y verificación de productos.
- Zonas de almacenamiento: que cuentan con estanterías, racks o sistemas de almacenamiento apropiados para el tipo de producto, considerando aspectos como la accesibilidad, la seguridad y la optimización del espacio.
- Áreas de preparación de pedidos: estando ubicadas estratégicamente para minimizar el tiempo de recorrido y contar con el espacio y equipamiento necesarios para preparar los pedidos de manera eficiente.
- Oficinas y áreas de control: teniendo el espacio y equipamiento adecuado para las actividades administrativas, control de inventario y gestión del CD.
Procesos clave
Los centros de distribución son muy distintos entre sí. Pero si se tuvieran que nombrar algunos de los procesos más importantes o que suelen ocurrir en la mayoría de ellos, serían los siguientes:
- Recepción de mercancías.
- Almacenamiento.
- Preparación de pedidos.
- Despacho y distribución.
Tecnologías utilizadas
En el mundo logístico actual los centros de distribución son inentendibles sin la consideración de la tecnología como eje transformador. Por eso, hay que citar algunas importantes:
- Sistemas de gestión de almacén o WMS: permiten gestionar el inventario, la ubicación de productos, los movimientos de mercancías, la preparación de pedidos y otras actividades logísticas.
- RFID o Identificación por radiofrecuencia: utiliza etiquetas electrónicas para rastrear la ubicación y el movimiento de productos dentro del CD, mejorando la visibilidad y el control del inventario.
- Sistemas de transporte automatizado: implementan transportadores, grúas o robots para mover productos dentro del CD, reduciendo el trabajo manual y aumentando la eficiencia.
Beneficios de los centros de distribución
Para todas las empresas que trabajan con mercancías y requieren la preparación y envío de productos hacia el cliente final, los CD representan un inmueble vital.
Gracias a ellos se producen beneficios importantes:
- Reducción de costes logísticos.
- Mejora del servicio al cliente.
- Mayor visibilidad de inventario.
- Incremento en la productividad y eficiencia generales.
- Flexibilidad y escalabilidad.