La lava que se desprende del volcán de La Palma en su recorrido desde que inició hace más de una semana su erupción, cobró velocidad y llegó a la costa la noche de este martes para entrar en choque térmico con el mar..
De esta manera, la colada de lava que emergió de la erupción volcánica de La Palma, ha llegado al mar en una zona de acantilados en la costa de Tazacorte para entrar en la actual fase denominada hawaiana.
Piedras incandescentes que caen al mar de manera lenta, es lo que se ha podido observar en esta nueva fase de la colada de lava que ha ido cayendo de forma lenta, de acuerdo a la retransmisión que realiza la Televisión Canaria desde un barco y las imágenes facilitadas desde el buque del Instituto Español de Oceanografía Ramón Margalef.
Columnas tóxicas
Por su parte, el Consejo de Ministros de España ha declarado el área que ha sido afectada como una zona de catástrofe, toda vez que la lava entró en las plataneras y comenzó a carbonizar plásticos y abonos.
Sin embargo la oscuridad de la noche, no ha permitido ver las columnas de vapor de agua que, aparentemente se han debido formar debido al choque térmico de la lava con el mar, cuyas columnas conducen unos gases que pueden resultar tóxicos para los ojos, los pulmones y la piel de los locales.
Destaca además que la lava ha destruido alrededor de 600 viviendas, a la fecha, según recuentos provisionales, muchas de ellas primeras y únicas residencias de algunos de los 6.200 evacuados, quienes fueron distribuidos por casas de amigos y familiares, centros sociosanitarios y hoteles.
Ante esta fase eruptiva volcánica, las autoridades locales recomiendan permanecer retirados del lugar al menos a 3,5 kilómetros de la zona y han advertido que se producen nubes blancas de vapor de agua pero también gases nocivos y altamente peligrosos para la salud.