La crisis sanitaria derrumbó la economía, disparando los costos para la adquisición y el alquiler de viviendas en la localidad que en el pasado, era la más económica de toda la comunidad autónoma

La inestabilidad económica ha repercutido seriamente en los precios de las viviendas en Ávila, por lo que se ha convertido en la única provincia de España donde el incremento inmobiliario fue considerable, en comparación con el promedio nacional.

El primer trimestre del año fue determinante para la localidad, puesto que la crisis sanitaria encendió las alarmas, generando inquietud ante las medidas adoptadas por el gobierno español para beneficiarse con las ayudas de vivienda y alquiler.

Aunque durante los meses de enero y marzo los precios se estancaron, las estadísticas dieron un giro radical y Ávila pasó de ser la provincia más barata a la más costosa para vivir en la comunidad autónoma. Comprar una vivienda es prácticamente imposible, ya que la media se ubica en 946 euros por metro cuadrado, lo que equivale a un aumento de 6,5 por ciento en comparación con el 2019. 

De esta manera, las provincias de Castilla, León y Soria resultan más accesibles debido a que los costos de las viviendas descendieron, al igual que en Burgos, Palencia y Salamanca, mientras que en Zamora y en Segovia aumentaron en más de 3 puntos.

Todo parece indicar que el boom inmobiliario pasó a la historia, registrando fuertes variaciones en una provincia que se había habituado a la estabilidad de los costos de vivienda. Revisando el histórico local, se aprecia la fluctuación al pasar de un precio mínimo, a una caída, previo al alza sustancial.

Y es que la variación del costo de la vivienda en venta en la provincia de Ávila durante este mes de abril, también se ubicó en más de 855 €/m2, con una sutil variación de +0,6 % comparativamente con marzo y +3,9 % con respecto al mes de abril del 2019.

Mientras tanto, son miles de personas las que a diario se esfuerzan por mantener su hogar, puesto que el ingreso familiar se vio seriamente afectado por la pandemia. Algunos de ellos tendrán acceso a las ayudas del gobierno, pero pasará un tiempo para que todo vuelva a la normalidad.

Desescalada con incertidumbre empresarial

Con relación a la dinámica económica, los representantes de la Confederación de Empresarios en Ávila manifestaron que aún no tienen claras las medidas que los beneficiará para palear la crisis en el sector financiero. A su juicio, predomina la desinformación y vaticinan grandes pérdidas durante el proceso de desescalada.

Conscientes de que el sector sanitario es la prioridad, exigen que prevalezca la igualdad en las comunidades autónomas, pues observan con preocupación que algunas están levantando el confinamiento con la apertura de comercios y otras deben continuar con las medidas de distanciamiento social. 

Por la cercanía con la capital, ciertas provincias mantienen una dinámica comercial muy prolífica, como en el caso de los alquileres y la adquisición de viviendas, pues muchas personas laboran en Madrid pero residen en Ávila. Lo mismo ocurre con la comercialización y distribución de alimentos que tienen salida al mercado nacional.

Con respecto a la apertura de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) los autónomos en Ávila indicaron que no están de acuerdo con fijar una fecha para la extensión de dicha medida, pues consideran que todo debe estar sujeto a la estabilización de la economía y es posible que a finales de junio aún existan negocios cerrados por la crisis sanitaria.