Serias críticas ha recibido el jefe del Gobierno Español, el socialista Pedro Sánchez, en relación con la situación que se registran actualmente Cuba por las protestas a favor de la democracia, por cuanto Sánchez evitó llamarla «dictadura» en un programa de televisión, por lo cual fue instado por un grupo de socialistas a «llamar las cosas por su nombre».
El presidente del Gobierno, ante la situación apenas atinó a decir que evidentemente «Cuba no es una democracia», así como su equipo de ministras se las ha ingeniado este miércoles a través de nuevas fórmulas, con el fin de evitar también referirse al régimen en cuyo mando está Miguel Díaz -Canel, heredado de los hermanos Castro, como una dictadura.
Es por esta razón, que históricos socialistas como la plataforma «La España que reúne», integrada por antiguos miembros socialistas de vieja data, le han solicitado a Sánchez, «una posición clara de apoyo a la democracia y a la libertad en Cuba» debido a la crisis que atraviesa en los actuales momentos.
El evitar utilizar la palabra «dictadura» por parte de Sánchez sobre la crisis política en Cuba, así como las polémicas palabras de la diputada de Podemos Aina Vidal, quien ha dicho «Cuba no es una dictadura», provocaron el pronunciamiento de «La España que reúne» a través de un comunicado.
En el marco del referido texto, los socialistas han exigido al presidente Sánchez que se posicione en apoyo a «la democracia y a la libertad en Cuba» y a «un verdadero proceso de transición económica y política que deje atrás más de medio siglo de políticas represivas, populistas e iliberales», revela el comunicado emitido al Gobierno español.
Por su parte desde Vox, la formación acusa a Sánchez de ser «cómplice» de la represión en Cuba y Ciudadanos le exige liderazgo. La líder del partido naranja, Inés Arrimadas, ha señalado que es una «vergüenza» que «ni un solo miembro del Gobierno se atreva a decir que en Cuba hay una dictadura comunista».